23/12/11
Saturnalia o la fiesta de los esclavos
17/12/11
· 365 steps ·
365 días menos.
A 92,1 km. equidistantes del km. 0.
Se vislumbra el reflejo de un comienzo en el retrovisor.
1h y 7 mn. de trayecto vibrante.
1º grado bajo 0.
2ª fila en la puerta, espera.
19 horas transcurren en un parking.
Subida.
Pisadas silenciosas y sonrientes entre adoquines.
2 paradas 2 en 2 barras.
18h. Una luz inunda la estancia.
Todo transcurre entre dos [ ]. Un balcón estrecho
sobre una plaza banal.
Sin ruido.
En la estancia silenciosa y voluptuosa
entra despacio la noche y a ese ritmo,
entre las arcadas de la plaza,
se trenzan los pasos de un apretado baile.
1h 35 mn.
8 mini-tragos se trasvasan a un vaso de plástico.
Se suben de puntillas los escalones de caracol.
Retorno a la estancia.
Arabescos de latón blanco sobre una pared verde.
Corona de voluptuosidad.
Bella durmiente.
Larga figura.
Clarea el amanecer en su tiempo real, minuto a minuto.
Desperezarse en el gris retorno.
Bonita espalda.
Tocan las 12.
Bonita escapada.
Gris retorno.
Un roce furioso revienta el neumático.
10 peligrosos minutos en un arcén
ennegrecen manos y frentes en sincronía.
Estampida feliz hacia un gélido aseo
una vez más estampado en su zaguán.
La complicidad alcanza su tensión máxima.
La lentitud del retorno es intencionada
y desemboca en una parada
con intermitentes blanco naranjas
tick, tack, tick, tack, tick, tack,
naranja, blanco, naranja, blanco, naranja, blanco,
intermitente, páralo, interminable.
Déjalo estar.
¡ No, no lo dejo estar !
Separación.
Un pañuelo inocente en el asiento de atrás
le arranca una sonrisa.
Mete la nariz para esnifar su olor profundo
se lo enrosca en el cuello desnudo
para aliviar la siguiente noche ausencia.
10/12/11
· compartir noche ·
Hablo contigo…
Hablo contigo, ignoro dónde estás, hacia qué luz busca mi ser el eco en que te escucho.
No hay usura en tu voz, yo sé que un aire limpio te respira, que algo redentor, alguna claridad que arrastra el río, lleva el pensamiento tuyo.
Hablo contigo, una intacta pasión vive en tu fósforo, una única luz que no se apaga mientras la muerte fluye, mientras la muerte sufre esta palabra.
Y hablo, hablo contigo alrededor de un hueco, alrededor de mí como el que gira mutuo, como aquel que dentro de nosotros es próximo y se acerca con su haz luminoso de pureza.
Hablo ante el destino que imagina el hombre, eso de desvalido, eso de delirante y turbio hablo contigo. Y es de noche, es de noche en los dos como metal oscuro y vemos cómo largamente la verdad extiende su único hilo de saliva, un único alfabeto en el rumor de todos.
Juan Carlos Mestre.
Gracias, hermano.